¨El parque cuenta con siete plazoletas, las cuales son
denominadas como atributo a la cultura Muisca: la plazoleta del reloj, astral,
el sol (sué), bochica, chiminigagua, bachue y moxa (gente), donde cada una toca
temas históricos y culturales de los indígenas, también se encuentran los
obeliscos, lo más interesante del parque, puesto que desde allí se puede
visualizar un panorama realmente agradable de la localidad de Suba y parte del
municipio de Cota.
¨Cuenta con senderos sobre el occidente de la ciudad y
antiguas especies sobrevivientes de flora y fauna nativa. Desde su mirador, en
días despejados se puede observar el Nevado del Tolima, el Nevado del Ruiz y el
Nevado de Santa Isabel, ubicados en la cordillera central de los andes
colombianos.
¨Dentro del parque podemos encontrar una huerta, siendo este
un espacio dado por la administración en donde se desarrollan procesos de
cultura urbana o ecológica como procesos demostrativos para grupos o
individuos que como el cabildo Muisca de Suba cultivan sus hortalizas,
aromáticas y demás, aportando a la ciudadanía una herramienta más de
enseñanza.
¨Como nos cuenta Adrian Hernández, quien hace parte del
equipo de educación, el parque fue construido con el propósito de rescatar la
cultura Muisca y no perder esa riqueza precolombina. Por ello su diseño
arquitectónico que hace alusión y nos lleva a épocas antiguas en donde los
indígenas podían diferenciar todas las estaciones por medio de la observación
desde los picos más altos.
¨Este parque, que aproximadamente tiene una extensión de
seis hectáreas y queda ubicado en la carrera 86ª Nº 145-50, puede ser
visto como un ecosistema de importancia regional por su valor paisajístico, de
conectividad, restauración ecológica y aspectos de biodiversidad.
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